domingo, 24 de mayo de 2020

MI QUERIDA ESPAÑA, ESPAÑA MÍA, ESPAÑA NUESTRA

UN SISTEMA ROTO, INJUSTO Y AVERIADO
Vivimos en una sociedad con un sistema caduco, trasnochado y averiado, donde abundan las incoherencias, las chapuzas y las injusticias, lo que ha generado la mayor desigualdad social entre seres humanos donde una élite nada en la abundancia, frente a una gran masa sumida en una inmensa pobreza.
Un sistema donde los puestos mas elitistas de la sociedad no se consiguen por el talento o el esfuerzo, sino porque eres hijo de fulanito o menganito que están en la cumbre y te colocan aunque seas un zoquete. Una sistema donde es igual ser pícaro que honrado, inmoral que virtuoso, ignorante que sabio, generoso o estafador, trabajador o ladrón, pues lo único que se valora es el status económico que tengas, que marca el dicho de "poderoso caballero es don dinero".
Un mundo donde la gente que nos mantiene a flote  es la que tiene lo salarios mas bajos y a la que menos se protege. Donde miles de familias se endeudan para formar a sus hijos en la universidad, para mandarlos a nutrir las colas del paro, cuando terminen su carrera.
Un sistema que frente a la sociedad humilde, honesta y trabajadora, se muestra  otra mas obscena, la del señorito y la picaresca, la del político corrupto, ese del trinque y el fraude, políticos intrigantes, mercaderes sin escrúpulos y sin vergüenza, que solo buscan su poltrona y sus cuotas de poder, y frente a esta obscenidad, solo vemos a esa España triste y barroca, donde se enseñorean la tristeza y la pobreza, los señores y los siervos, explotadores y explotados, y dan lugar a los odios y antagonismos viscerales, que tan trágicamente han terminado en nuestra sufrida y querida España.
Una sociedad donde el que roba un millón es un señor y el que roba para alimentar a su familia va a la cárcel o a prisión, donde es mas respetado el que explota de forma obscena a sus trabajadores, que al obrero que vive de sus manos para llevarse un raquítico salario a su casa.
Un sistema donde los políticos no llegan a la política para hacer política que sirva a los ciudadanos, sino para vivir de la política, donde la democracia queda reducida a un lider que no permite disensión alguna entre sus filas.
Mal va España cuando pide a gritos que surja un caudillo que haga resonar su voz y que arrastre en pos de si a todo el pueblo al grito de !Viva España con honra!, fuera la España envilecida, degradada, abajo los corruptos, los populismos, los mangantes, especuladores y ladrones de la nación. Viva la España entusiasta, noble  y generosa.
Triste vivir en un país  donde se estima mas al que vive de los otros, que al que trabaja noche y día, al que roba y esta fuera de la ley, que al que ayuda a la justicia y no duda en sancionar, un pais que configura la España barroca del revuelto, del odio, de la envidia y la ojeriza, de la inquina, del acoso y el abuso, donde la franqueza es grosería y la buena fe candidez, un país donde ha vuelto el derecho de pernada, si en algo estimas tu jornal y tu soldada, un país donde la democracia solo es un remedo del estado neoliberal, donde el poder del dinero, corrompe, especula, vende, trafica, envilece, explota y establece la política social que a su soberbia le apetece, donde se  arrincona la virtud y  la inteligencia y se premia el vicio, la fuerza bruta y la malicia, en un sistema desquiciado, injusto, roto y averiado.
Esta es nuestra España, nuestras querida y sufrida España, la España que ha tenido que soportar a lo largo de los siglos la soberbia homicida del poder establecido, el ruido de sables y la acción fratricida, donde como siempre, el que sale perdiendo y pagando es el sufrido pueblo.

ESPAÑA MÍA, ESPAÑA NUESTRA, POBRE ESPAÑA.

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