UNA GRAVE OFENSA A LA GUARDIA CIVIL
El Ministro Grande-Marlaska, pretende imponerse al Poder Judicial, eliminando de un plumazo su independencia y contraviniendo la Constitución, al aplicar el correctivo de cese al Coronel Pérez de los Cobos, cuando estaba cumpliendo como policía judicial, las ordenes dadas por la Juez.
El Ministro Grande-Marlaska, pretende imponerse al Poder Judicial, eliminando de un plumazo su independencia y contraviniendo la Constitución, al aplicar el correctivo de cese al Coronel Pérez de los Cobos, cuando estaba cumpliendo como policía judicial, las ordenes dadas por la Juez.
El Propósito de
Marlaska es impedir la investigación judicial sobre la manifestación del 8M,
tratando de sabotearla y lo que es peor, desafiando a la Justicia, tomando
represalias contra los Guardias Civiles que la investigaban, en este caso contra
el Coronel de la Guardia Civil, por negarse éste a informarle sobre
investigaciones que están sobre secreto de sumario.
Es bien sabido
por todos los juristas, que en un investigación sobre supuestos delitos, los
agentes judiciales solo reportaran información sobre sus investigaciones al
juez del que dependen por tratarse de información sumarial y a nadie mas, sujetos a la rigurosa reserva a la que está sujeta la policía judicial.
La intromisión del Ministro Marlaska es del todo punto intolerable y lo que está por saber es si la Justicia se lo va a permitir, porque entonces habría perdido su independencia, y pondría en peligro el espíritu democrático.
La Juez ha considerado que puede existir un indicio de supuesto delito en el Delegado del Gobierno (Franco Pardo), y también sobre el Ministro Illa y sobre Fernando Simón, por haber autorizado la manifestación del 8M cuando diez días antes había recomendado por correo electrónico que se tomasen medidas para evitar el contagio.
La sospecha también recae sobre el Ministro Illa y sobre Fernando Simón, responsables en ese momento de la gestión del coronavirus.
La Juez debe actuar con contundencia contra quienes ponen trabas o impedimentos y quieren obstaculizar el desarrollo de una investigación judicial.
.La intromisión del Ministro Marlaska es del todo punto intolerable y lo que está por saber es si la Justicia se lo va a permitir, porque entonces habría perdido su independencia, y pondría en peligro el espíritu democrático.
La Juez ha considerado que puede existir un indicio de supuesto delito en el Delegado del Gobierno (Franco Pardo), y también sobre el Ministro Illa y sobre Fernando Simón, por haber autorizado la manifestación del 8M cuando diez días antes había recomendado por correo electrónico que se tomasen medidas para evitar el contagio.
La sospecha también recae sobre el Ministro Illa y sobre Fernando Simón, responsables en ese momento de la gestión del coronavirus.
La Juez debe actuar con contundencia contra quienes ponen trabas o impedimentos y quieren obstaculizar el desarrollo de una investigación judicial.
"VIVA LA GUARDIA CIVIL"
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